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LA

MEJOR 

OPCION

DE

INVERSION

Ni los depósitos bancarios, ni la Bolsa, ni los bonos. Actualmente, la mejor inversión es la vivienda.

Este activo ofrece una rentabilidad bruta media anual próxima a los dos dígitos. No hay producto financiero de bajo riesgo que se acerque a este rendimiento y parece muy difícil que lo haya mientras que los tipos de interés, el precio del dinero, continúe estancado en el 0%.

 

Exactamente, según el Banco de España (BE), la rentabilidad en el sector inmobiliario residencial asciende hasta el 8,3%.

 

Este porcentaje resulta de la suma de la explotación de la vivienda a través del alquiler (4,4%) y de su revalorización (3,9%). Otras inversiones alternativas como el bono a 10 años o los depósitos bancarios apenas dan un 1,2% y un 0,3%, respectivamente.

 

Peor comportamiento todavía describe la Bolsa (Ibex 35): -24,2%.

Promovenos viviendas destinadas al alquiler

 

En el mercado están surgiendo otras opciones para invertir en alquiler sin tener que comprar la vivienda. Desde Habitais gestionamos una cooperativa de arrendadores, es una fórmula dirigida a los pequeños inversores interesados en el alquiler. Promovemos la construcción de inmuebles destinados al alquiler en régimen de cooperativa donde los inversores invierten para obtener una rentabilidad.

 

“un club de inversores cuyo interés se centra en la promoción de viviendas para rentabilizarlas en régimen de alquiler”.

 

A través de este sistema se gestiona todo el proceso, desde la compra del suelo, gestión de la construcción, la selección de inquilinos, la gestión de arrendamiento y las garantías de cobro.

 

“La rentabilidad prevista a 10 años es del 7,5% con un precio de venta de la vivienda estimado de 130.000 euros en ese plazo”

¿Por qué comprar un piso usado para arrendarlo cuando por el mismo dinero se puede construir uno nuevo específicamente diseñado para sacarle el máximo rendimiento poniéndolo en alquiler? 

 

Habitais trabaja en un modelo de cooperativa en la que no se haga la división horizontal del edificio, sino en el que todo el bloque se considere un activo en alquiler en el que cada inversor adquiera el porcentaje que desee". Se trata de un modelo que permitiría realizar inversiones menores a la compra de un inmueble, recibir dividendos por las rentas por la parte proporcional aportada y obtener liquidez rápida con la venta de la participación.

 

Ventajas para el inversor y el inquilino

 

La principal ventaja que tiene para el inversor una cooperativa destinada al alquiler frente a la compra directa del inmueble es que se trata de un producto ya diseñado para el alquiler. Las viviendas están proyectadas para cubrir las necesidades de los inquilinos, alcanzando mayor rentabilidad. Además, el régimen de cooperativa permite además mayor transparencia en la gestión, siendo los inversores miembros de la junta rectora.

 

Para los inquilinos, la ventaja es que son viviendas diseñadas pensando en sus necesidades, por lo que contienen prestaciones mejor valoradas por los inquilinos y se eliminan los extras que encarecen la renta sin aportar ninguna ventaja.

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